Radio Betania 9.12.2020 Conocí a la radio a través de mi tío Ignacio Mendoza me dijo, que existía una radio que pasaba la misa desde la Catedral y de la Mansión y eso me llamo la atención, empecé a escuchar y me gusto me atrajo las canciones, era el año 1998, de casete se escuchaba los conciertos de Martin Valverde, Enrique Ascoy, Daniel Poli, y de otros cantantes, no había mucho material discográfico, así es como empecé a engancharme con lo que es Radio Betania.
Él es Valerio Tirana Mendoza casado con Lili Bravo sus hijos Ángel, Gabriel, Juan Pablo, María Celeste, vive en el barrio San Antonio por la zona de la Pampa de la Isla. Ocupa el cargo de jefe de programación en 93.7fm
Cuenta que llego a la radio por una amiga que conducía un programa infantil, Hormiguitas de Cristo, y lo invito a formar parte del programa, “hice del personaje de Vito”, cuenta.
Valerio recuerda, la cálida acogida con que lo recibieron, recuerda a Erwin Alvares, Gabriela Rioja, Alberto Argote Richard Villagra, Gualdo Montenegro, después se integró Carlito Gil con 9 años de edad, Vitaliano Gutierrez quien le dijo; “aquí todos hemos empezado como voluntarios si pasas esa etapa puedes quedarte”; ya han pasado 15 años desde ese día y Valerio nunca más dejo Radio Betania, fue aprendiendo más del mundo de la radio, como las grabaciones, edición en audio, y mucha practica en programación.
Tirana asegura que su trabajo es muy dinámico, en programación está pendiente del reloj musical, de las cuñas, de los avisos, de todos los programas va conociendo algo nuevo, son cosas productivas que han servido para enriquecer su fe y para conocimiento de todo lo que es nuestra Iglesia católica.
Estudio comunicación social y continua preparándose en todo lo que concierne a su aérea, actualmente es estudiante para actor de doblaje y locución comercial. “Me prepare en todo lo que corresponde a mi trabajo y me sigo preparando para servir mejor al Señor en esta obra”. Aseguro
Valerio dice estar agradecido con Tía Amalita, ha aprendido de ella la responsabilidad, la diligencia en el trabajo, la humildad “para mí Tía es un cable a tierra me recuerda que debo ser humilde”, así también le recuerda que es sacerdote de su hogar y que tiene que ser consciente de su labor como padre de familia.
A Mauricio Aguilera, primer director de la radio, le agradece por la confianza que le dio aun sabiendo que no tenía ningún conocimiento en radio, “tenía una base emocional y un poco de conocimiento en computación”, de esa manera se ha ido formado en el camino y en la práctica del trabajo.
Betania es el lugar de encuentro con Nuestro Señor, en estos 22 años ha crecido la audiencia, ha crecido el número de amigos betania, y los retos son muy grandes “sigamos orando por los proyectos que tenemos en el corazón, pido al Señor un día se haga realidad el sueño de todos, que tengamos Radio y Televisión Betania para llegar hasta los confines del mundo con el mensaje evangélico”, concluyo.